por Administrador / viernes 17 de enero de 2025
Autor: Paloma Bores Lorenzo, Directora de Comunicación y Admisiones de la Universidad Ítaca
Un líder es una persona que tiene el rol o posición de guía ante un grupo. Tiene capacidad de influenciar a los integrantes del grupo, los impulsa a lograr sus objetivos y los inspira a ser mejores.
Muchas situaciones de la vida requieren que asumas un rol o posición de liderazgo y, dependiendo de la circunstancias, puedes adoptar diferentes estilos o enfoques de liderazgo. Desarrollar habilidades de liderazgo son útiles en muchos aspectos de tu vida.
Para desarrollar un estilo de liderazgo, primero debes conocer los diferentes estilos que existen. En este artículo encontrarás cinco formas de liderazgo que te ayudarán a encontrar el tipo de líder que eres, o te gustaría ser.
1. Liderazgo Burocrático
Un líder burocrático toma decisiones finales basándose estrictamente en las leyes y políticas. Son líderes que tienen muy claros los objetivos y que respetan procesos y rutinas. Es posible que escuchen los enfoques nuevos y no tradicionales sugeridos por los empleados, sin embargo, un líder burocrático generalmente favorecerá los libros y rechazará las propuestas que vayan en contra de las prácticas tradicionales. Algunas ventajas de este estilo de liderazgo son que los tiempos de entrega se cumplen, los riesgos de error son mínimos y los procesos funcionan eficientemente.
2. Liderazgo democrático
En el liderazgo democrático la decisión final sobre un proyecto se toma en función de las aportaciones de los colaboradores. Aunque el líder es el que toma la decisión final, generalmente pide y está abierto a implementar las opiniones y deseos de los trabajadores. Es un enfoque eficaz de liderazgo, ya que incluye a los colaboradores en el proceso de toma de decisiones.
3. Liderazgo autocrático
Una manera fácil de entender este enfoque es imaginar exactamente lo contrario de un líder democrático. Así es. Un líder autocrático nunca considerará pedir retroalimentación a sus empleados y lo más probable es que no evite tomar decisiones que puedan afectarlos directamente de manera a veces injusta. Este estilo de liderazgo es considerado anticuado por muchos, ya que es uno de los estilos menos efectivos. La falta de flexibilidad y compasión generalmente conduce a altas tasas de rotación de empleados.
4. Liderazgo transaccional
Este estilo de líder recompensa a sus trabajadores cuando realizan eficientemente una tarea y los castiga cuando no lo hacen. Este liderazgo es eficaz para lograr resultado rápidos y a corto plazo porque incentiva y motiva a los empleados. Sin embargo, hay que tener cuidado ya que este enfoque puede estar demasiado orientado a los resultados y causar desmotivación cuando no se logran.
5. Liderazgo de entrenador (coaching)
En este estilo de liderazgo, el lugar de trabajo funciona como un equipo o club deportivo. El líder (o entrenador) identifica las habilidades de cada individuo dentro de su empresa y trata de crear un entorno que fomente estas habilidades de cada empleado. Un entrenador se dedica a crear equipos que se comuniquen y trabajen bien entre sí. Es un estilo muy positivo ya que promueve un buen ambiente de trabajo que reconoce a cada uno de los empleados.
Es importante notar que tú puedes dominar cada estilo de liderazgo y utilizar el que sea más apropiado para la situación en la que te encuentras o proyecto que vas a realizar. También puedes combinar las ventajas de cada estilo y generar tu propio estilo de liderazgo.