por Administrador / martes 12 de mayo del 2020
Debes entender a dónde se va tu dinero y ahorrar un poco, estás dos frases no son sencillas de comprender. Todos tenemos gastos imprevistos debido a esos deseos espontáneos que llevan a nuestro bolsillo a quedar completamente vacío mucho antes de que llegue nuestro siguiente pago en el trabajo. En Universidad Ítaca nos dimos a la tarea de recolectar estos tipos para que puedas planificar tu presupuesto, ya sea familiar o personal, y lo haremos de formas fáciles, comprensibles y eficientes.
¿Alguna ocasión te has preguntado en qué gastaste tu dinero ese día? Quizá querrás construir y desarrollar un presupuesto, puedes comenzar con el método “50/30/20” en este conocerás como controlar esas compras compulsivas que te harán gastar de más y no te aseguran un ingreso estable:
Es tan sencillo como tener nuestro sueldo y el 50% debe ser para gastos básicos mensuales, ya sea recibos de la luz, agua, electricidad, etc. El 30% debe dirigirse a objetos menos indispensables pero necesarios para la vida diaria, estos comprenden el pago del cable, el internet, la ropa, los accesorios para vestir, etc. Y por último el 20% debe ir asignado solamente a el ahorro para el futuro, aquí es donde se visualizan esos gastos de imprevistos, como regalos de cumpleaños, aniversarios, bodas, días festivos, etc.
Existe otro método que es igual de sencillo que el anterior y está diseñado para aquellas personas que no quieren complicarse la vida planificándose ni poniéndose límites extremos y consiste en separar nuestro presupuesto en 2 partes: estos los conoceremos como gastos constantes / todo lo demás. Dentro de los gastos constantes encontraremos la cantidad de dinero que gastas en lo más indispensable como comida, recibos de luz, ropa, automóvil, etc. En la parte de todo lo demás vamos a encontrar cualquier tipo de diversión y compras que no son tan necesarias, cafeterías, restaurantes, conciertos, cine, vestidos costosos, etc.
El siguiente método que te mostramos es conocido como nuestro “presupuesto básico”, hecha para personas con ingresos inestables y para aquellos que desean ahorrar mucho. Este consiste en determinar tu ingreso mínimo al mes. Deberás calcular la cantidad que necesitas para los gastos de primera necesidad. Este presupuesto mínimo debe dirigirse a comida, gasolina, telefonía, luz, agua y gas para todo el mes. Todo el dinero extra que recibas independientemente de este “presupuesto básico”, ahórralo para los objetivos a largo plazo como los regalos, la vestimenta, restaurantes, viajes y diversión.
A partir de aquí veremos un método más un poco complicado pero que seguramente te garantizará tener dinero al final del mes, el primero de ellos es conocido como el método del “subsidio semanal” para todas aquellas personas a quien se le acaba el dinero inesperadamente unos días antes de recibir el siguiente sueldo y quieran a su vez ahorrar un poco.
Deberás calcular cuánto de tu ingreso mensual quieres gastar, y decidir cuánto es lo que quieres ahorrar. Divide la primera cifra en 4 partes y págate “subsidios semanales” que puedes gastar en lo que quieras. Queda prohibido pasar de este límite semana.
Uno de los errores más comunes de las personas es no calcular cuánto dinero necesitarán durante el mes y cuando cobran su sueldo, este lo gastan en los primeros días, este método te ayudará a resolver este dilema.
Es fundamental tomar decisiones orientadas a gastar de manera inteligente, ahorrar más o invertir mejor, para la mayoría de mexicanos la quincena alcanza en promedio para 13 o 14 días, y cuando se juntan tres fines de semana los gastos pueden llegar a agobiarte financieramente. Si adoptar por lo menos uno de estos hábitos a seguir, te aseguramos que, con tiempo, dedicación y esfuerzo, tu dinero rendirá más y podrás invertir en las actividades que más te apasionan.